Cristian Di Betta, titular de CEPA, aseguró en Viva la Mañana que el incremento ronda el 10%, por lo que el kilo de pan pasó de $360 a $390, las tortas de $590 a $650 (la docena) y las facturas comunes de $870 a $960 (la docena).

    En diálogo con un medio local, Di Betta señaló: “Realmente se nos hace imposible sostener los precios con la inflación y el aumento que los productos sufren a diario. A esto le sumamos la escasez de harina subsidiada que llega a Mendoza”.

    De acuerdo con lo informado, son pocos los molinos que entregan harina subsidiada en el país y, a la provincia, casi no llegan los bolsones cuyo costo no supera los $2.000. “Por tal motivo, los panaderos debemos comprar la bolsa a $3.000 y eso hace que los precios se eleven cada día más”, agregó Di Betta.

    El empresario aseguró que “hay mucha gente que se está anticipando a las Fiestas de fin de año y ha comenzado a reservar panificados con la única finalidad de congelar precios”.

    Y agregó: “La idea es ganarle a la inflación y es cada vez más la gente que se acerca para cancelar productos y de ese modo no pagar de más. Algo que jamás pasó, pero que se está observando con mucha frecuencia”.

    Asimismo, Di Betta manifestó que “se espera que los productos propios de las Fiestas lleguen a las góndolas con aumentos, debido a que los precios de las materias primas no dejan de trepar”.