Es para el segundo trimestre del 2022. Se destacan dos rubros de mayor peso: servicios empresariales y de informática.
El segundo trimestre de 2022 fue el de mayores exportaciones de servicios basados en conocimiento de la historia. Se exportaron 2.060 millones de dólares, 22,6 por ciento más que en el mismo período de 2021 y un 19,2 por ciento comparado con 2019. Servicios empresariales y servicios de informática, los de mayor peso.
Se trata de la quinta suba interanual consecutiva. “La economía del conocimiento es una política de Estado que este gobierno va a seguir potenciando porque creemos que es parte fundamental de la agenda de desarrollo para generar empleo de calidad y divisas para el país. Este sector es una de las piezas que tenemos que integrar a la producción para avanzar hacia la economía 4.0, que es presente y es futuro”, afirmó el secretario de Industria y Desarrollo Productivo, José Ignacio de Mendiguren.
De acuerdo a datos del Centro de Estudios para la Producción (CEP-XXI), en el buen desempeño de los SBC se destacan dos rubros de mayor peso: servicios empresariales y servicios de informática. Los servicios empresariales totalizaron ventas externas por 1.204 millones de dólares y crecieron un 30,6 por ciento interanual y 15,8 por ciento comparada con 2019. El rubro representó el 58,4 por ciento de las exportaciones totales de SBC y aportó la mayor incidencia positiva en el desempeño general con 16,4 puntos porcentuales. De esta manera, registra cinco trimestres de suba interanual ininterrumpida.
El secretario de Economía del Conocimiento, Ariel Sujarchuk, destacó: “Estamos construyendo una política integral para motorizar el crecimiento estratégico de la Argentina a partir de la economía del conocimiento, una actividad cada vez más federal y transversal a toda la cadena productiva. Con las nuevas herramientas otorgadas a las empresas generamos ventajas que alientan la creación de empleo, promueven las exportaciones y estimula la formación y capacitación de nuevos talentos”.
Por servicio
Al interior, se destacó el crecimiento de los dos principales subrubros: los servicios profesionales y de consultoría donde las exportaciones representaron el 51,6 por ciento del total y subieron 30,6 por ciento; y los servicios técnicos relacionados con la ingeniería, arquitectura y el comercio que representaron el 34,8 por ciento del total y subieron 32,9 por ciento. Por último, las exportaciones de los servicios de investigación y desarrollo se expandieron 25,2 por ciento (con el 13,6 por ciento).
Los servicios de informática exportaron 636 millones de dólares, lo que representó una suba interanual del 13,6 por ciento y 36,9 por ciento contra 2019. Representaron el 30,9 por ciento de las exportaciones totales de SBC con una incidencia positiva de 4,4 puntos porcentuales. Se trata de la quinta suba interanual consecutiva, y registró el mejor segundo trimestre de la serie (el anterior ocurrió en 2018 con 567 millones de dólares de ventas externas).
Entre los demás rubros, que sumaron el 10,7 por ciento de las exportaciones totales de SBC, se destacó la evolución interanual de cargos por el uso de la propiedad intelectual (+19,4 por ciento, con una representación del 3,3 por ciento en el total de ventas externas de SBC) y de servicios personales, culturales y recreativos (+12,5 por ciento; 5,7 por ciento del total). En tanto que el rubro de telecomunicaciones e información decreció un 7,9 por ciento interanualmente y explicó el 1,7 por ciento del total.
No registrados
Una de las problemáticas con las que cuenta el sector es la gran cantidad de exportaciones no registradas. Según Argencom, el año pasado unos 1.800 millones de dólares de exportaciones no quedaron registradas por tratarse de ingresos de profesionales freelancers que desde Argentina prestan servicios a empresas del exterior.
“Se estima que esta economía informal generó exportaciones no registradas por 1.800 millones de dólares durante 2021, cerca del 30 por ciento de las oficiales», señaló el director ejecutivo de Argencon, Luis Galeazzi. El directivo aseguró que «esta pérdida de competitividad la sufrimos todos y es difícil de revertir, porque por lo general los profesionales que migran al mercado informal no se reincorporan al mercado oficial».
En junio de este año, el directorio del Banco Central (BCRA) estableció que quienes trabajen para empresas en el exterior desde Argentina podrán disponer de hasta 12.000 dólares en el año en cuentas en entidades financieras locales sin requisito de liquidación en pesos para evitar esta fuga. Las cuentas se encuentran activas en muchos de los bancos – la medida es optativa-, pero aún no hay resultados relevantes.