El debate por las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) sumó ayer un nuevo episodio. En medio de los tironeos internos por una posible suspensión, en Casa Rosada ratificaron la postura del presidente Alberto Fernández: «El Gobierno sostiene que hay una ley vigente, que es una buena y que ya está en marcha«, dijo la portavoz, Gabriela Cerruti, quien además aseguró que el tema no es «una prioridad», a diferencia de otros proyecto como el de Renta Inesperada, cuyo debate quedó congelado en el Congreso. Ese planteo es contrapuesto al de los gobernadores e intendentes del Frente de Todos que, en su gran mayoría, insisten con eliminarlas. Los líderes provinciales respaldan la propuesta presentada por diputados de los partidos provinciales de Río Negro y Misiones que, por el momento, está trabada. Mientras tanto, el Ministerio del Interior avanza con la organización de los comicios tal como está estipulada por ley.

    Más allá de las diferencias internas, el proceso burocrático para la realización de las elecciones sigue su curso con las PASO incluidas. El 25 de abril comenzará el cronograma con el cierre del padrón provisorio. A pesar de que aún faltan seis meses para esa fecha, la Dirección Nacional Electoral (DINE), a cargo de Marcos Schiavi, ayer cerró la ronda de encuentros con apoderadas y apoderados de partidos políticos de toda la Argentina. Así, marcó el fin de las reuniones programadas, previo a la inminente apertura de los procesos administrativos. Luego del cierre del padrón provisorio en abril, el calendario continuará el 15 de mayo, cuando venza el plazo para la convocatoria a las elecciones.

     

    Las diferencias en el Frente de Todos

    En paralelo al avance de las pautas establecidas, los cruces en el oficialismo en torno a cuál es la mejor estrategia para encarar el 2023, no cesan. Luego de que el ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro, asegurara que intentan «convencer» al Presidente de que impulse la suspensión de las PASO, Cerruti lo descartó por completo y remarcó que la realización de las Primarias «implica más democracia, más participación«. De fondo, resuena la intención de Fernández de utilizarlas para ir en busca de su reelección. Por el contrario, los gobernadores e intendentes, además de referentes políticos alineados con Cristina Kirchner, reclaman que se suspendan. «El cien por ciento de los gobernadores del FdT se manifestaron a favor de que no haya cuatro elecciones en el año. Es lo que plantea la mayoría del FdT, pero el que toma las decisiones es Alberto Fernández y por eso se generan tensiones», expresó De Pedro.

    En el Congreso hay dos proyectos presentados que van en ese sentido. Uno lo elaboró el diputado Luis Di Giacomo, aliado del Frente de Todos, con respaldo de legisladores de los partidos provinciales de Río Negro y Misiones. El otro fue presentado en marzo de este mismo año por los diputados de Juntos por el Cambio Margarita Stolbizer y Emilio Monzó.

    Mensaje al Congreso

    El Gobierno ayer no sólo volvió a manifestar su rechazo a esa alternativa, sino que redobló la apuesta y dijo que hay «otros temas más prioritarios» en el Congreso. Bajo ese argumento, Cerruti aprovechó para reflotar el proyecto de Renta Inesperada, que en su momento motorizó el exministro Martín Guzmán pero quedó congelado en algún cajón del Palacio Legislativo. Así, la portavoz presionó al bloque del oficialismo para que impulse nuevamente el texto que busca gravar el excedente de la renta y la ganancia que han tenido las empresas producto de la pandemia y de la guerra entre Rusia y Ucrania. «Necesitamos que se apruebe porque esto significa mayores ingresos para el Estado que van a ser redistribuidos en muchas de las políticas que muchos sectores están reclamando. Esa debería ser la agenda prioritaria del Congreso«, argumentó.

    «La familia» oficialista

    Consultada sobre las diferencias que existen en la cúpula de la coalición gobernante, la vocera presidencial definió la relación entre Alberto Fernández; la vicepresidenta, Cristina Kirchner; y el diputado nacional Máximo Kirchner, como «una gran familia» y agregó que están «preocupados y ocupados» por la seguridad de la exmandataria tras el intento de asesinato.