El proyecto ya había sido aprobado por los diputados en mayo, pero luego el Senado le introdujo modificaciones, por lo que debió volver a ser debatido y votado en la cámara baja.
Al mismo tiempo, garantiza cierto rigor presupuestario al limitar el incremento de las erogaciones a una proporción equivalente a 70% del aumento de los ingresos del Estado, según la agencia estatal Brasil y la francesa AFP.
El proyecto, uno de los principales y más urgentes de Lula desde su campaña electoral, ya había sido aprobado por Diputados en mayo, pero luego el Senado le introdujo modificaciones, por lo que debió volver a ser debatido y votado en la cámara baja.
La medida es instrumental a las políticas del mandatario, que tras asumir el 1 de enero pasado su tercer período de gobierno restableció programas sociales y subsidios, y fortaleció organismos estatales de cuidado del ambiente, que habían sufrido recortes presupuestarios en la gestión de su antecesor, Jair Bolsonaro.