El mandatario venezolano se expresó de esta manera porque un tribunal estadounidense entregó a la oposición los activos de la empresa venezolana Citgo, con sede en Estados Unidos.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, volvió a rechazar este jueves la orden de un tribunal estadounidense que entregó a la oposición los activos de la empresa venezolana Citgo, con sede en Estados Unidos, y advirtió que su par Joe Biden “le metió una puñalada” a la Conferencia de Bogotá en la que se buscó dinamizar una salida a la crisis venezolana.
“Lo que hizo el Gobierno de Estados Unidos no tiene parangón. No se atrevió ni Donald Trump a hacerlo”, denunció Maduro sobre la orden del tribunal.
El mandatario lamentó que con esa decisión judicial los opositores puedan “vender, negociar y hacer lo que les dé la gana” con la empresa estatal venezolana y acusó al expresidente encargado Juan Guaidó, a quien llamó “rata”, por haber huido a Estados Unidos para “coordinar” el “robo” de Citgo.
Maduro informó que la carta que autorizaba esta transacción ilegal, ya estaba lista desde el 7 de abril, por lo que la asistencia de la representación estadounidense a la Conferencia de Bogotá sobre el proceso político de Venezuela fue una farsa desde el inicio, según reprodujo el sitio de Últimas Noticias de Caracas.
“Petro convocó una conferencia sobre el proceso político de Venezuela, donde asistieron 20 Gobiernos que mayoritariamente pidieron levantar las sanciones a Venezuela”, repasó el presidente, que juzgó que la representación de Estados Unidos se burló de esta cita.
“Cuando asistieron a Bogotá ya sabían que había hecho la trastada más grande contra los intereses de Venezuela en el extranjero”, remarcó.
En ese encuentro, al que convocó Gustavo Petro, las delegaciones también reclamaron que Gobierno y oposición venezolana retomen el diálogo suspendido en México y se encare un proceso de elecciones libres y transparentes, a cambio de un levantamiento paulatino de las sanciones.
Para Maduro, el Ejecutivo de Biden puso en marcha “el saqueo más grande, el robo más grande que se ha hecho a Venezuela”.
Citgo tenía seis refinerías, de las que hoy están funcionando tres.
Tenía además 10.000 estaciones de servicio a lo largo del territorio estadounidense, con un valor estimado de 13.000 millones de dólares y una generación cercana a los 1.000 millones de dólares al año, que fueron dejados, según Maduro, en manos de los “saqueadores de la patria”.
La Licencia General 42, emitida por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), deja en manos de la opositora Plataforma Unitaria a la empresa Citgo, filial de la petrolera estatal Pdvsa.
La licencia autoriza al Parlamento del período 2016-2021, formado por una amplia mayoría opositora y relevado en 2021 por un nuevo legislativo, ahora de mayoría chavista, a efectuar «ciertas transacciones» en relación con «cualquier deuda del Gobierno de Venezuela», Pdvsa o «cualquier entidad» en la que la estatal posea «una participación del 50 % o más».
En un acto que televisó la estatal VTV, Maduro insistió con que a una decisión así “no se atrevió ni Donald Trump, entregarle la empresa Citgo en sus manos, para que la vendieran como les diera la gana, cuando les diera la gana, no se atrevió».
Guaidó llegó la semana pasada a Miami con la ayuda del Departamento de Estado de Estados Unidos, tras denunciar que fue «expulsado» de Colombia, a donde había ingresado ilegalmente con la intención de entrevistarse con las delegaciones que fueron a la cumbre sobre Venezuela.