Con analogías biologisistas -unas de sus preferidas- Milei situó al «virus» de Juntos por el Cambio «en los radicales, en la Coalición Cívica y en las «palomitas» del PRO”. «La solución más feliz para Juntos por el Cambio sería que yo me muera”, agregó.

    «Están condenados al fracaso». Con esa frase, el diputado ultraderechista Javier Milei borró de un plumazo la posibilidad de competir en unas PASO con otro bloque con su mismo tinte ideológico: Juntos por el Cambio. El legislador metió brasas al fuego de la interna opositora, al comentar que la solución para la alianza entre el PRO, la UCR y la Coalición sea que él estuviera muerto. En tanto Milei volvió a mostrar su simpatía con los seguidores bolsonaristas, al negar el golpe de Estado que padeció la democracia brasileña.

    Milei no dudó en cargar los dardos contra Juntos por el Cambio. A la UCR le destinó munición pesada: “A los radicales no les preocupa si gana el kirchnerismo la elección, porque igual van a seguir succionando la teta del Estado, mordiendo cargos”, aseguró el funcionario público.

    Con analogías biológicas, Milei situó el «germen» del fracaso de Juntos por el Cambio en su «composición». «El virus y el germen de JxC está en los radicales, en la Coalición Cívica y en las «palomitas» del PRO”, comentó para asegurar que «la solución más feliz para Juntos por el Cambio sería que yo me muera”, lanzó Milei, quien agregó aún mantener buen vínculo con Mauricio Macri y Patricia Bullrich.

    «El gran problema que tienen es que apareció alguien por afuera del sistema político, que no vive de la política, que no transa con la política como sí lo hacen ellos, que viven haciendo negocios”, completó el exasesor de Ricardo Bussi, cuando el represor era parte de la Cámara de Diputados durante la década del 90.

    Milei y su simpatía por los golpistas brasileños

    «Es falso el golpe de Estado, no es viable técnicamente». Ese fue el intento de defensa por parte de Milei a los golpistas brasileños que tomaron el edificio de los Tres Poderes para pedir una intervención militar en el gigante sudamericano. «Si del lado de Lula se pusieron Venezuela, Cuba y Nicaragua, ¿no hay algo que te llama la atención?», agregó al diario Clarín Milei con una postura un tanto parcial, ya que la solidaridad con el flamante presidente fue uniforme en casi todos los países del mundo.

    No es el primer apoyo de Milei a los militantes que se referencian en el expresidente Jair Bolsonaro. Al mismo tiempo que concurría el golpe de Estadp, el diputado ultraderechista se valió de una fake news en Twitter -elaborada por el portal La Derecha Diario- en el cual se describía al ataque antidemocrático como una «masiva protesta reclamando que frenen las medidas dictatoriales de Lula”. 

    Milei siempre buscó ser un aliado a Jair Bolsonaro, tanto al apoyar su campaña a la reelección como también siendo anfitrión en la visita de su hijo al país, hace unos pocos meses atrás.