El objetivo del encuentro será organizar una ayuda inmediata a Ucrania, blanco cotidiano de ataques rusos, y para empezar a preparar la reconstrucción. Zelenski cifró en unos 800 millones de euros la ayuda de emergencia que necesita en materia de energía.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en su intervención ante la conferencia, cifró en unos 800 millones de euros la ayuda de emergencia que necesita en materia de energía Ucrania, blanco diario de ataques rusos, ante el inminente invierno boreal.
«Esto costará alrededor de 800 millones de euros», precisó el mandatario ucraniano en un discurso por videoconferencia.
Después de las conferencias de Lugano, Varsovia y Berlín, el encuentro de París busca neutralizar la estrategia desplegada desde octubre por Rusia con el propósito de hacer sufrir a la población y debilitar la resistencia.
«Rusia actúa de manera cobarde» e «intenta sembrar el terror entre la población» atacando infraestructuras civiles, lo que son «actos de guerra», dijo el presidente francés, Emmanuel Macron, al inicio de la conferencia.
La voluntad de la comunidad internacional es de ayudar a los ucranianos a «resistir durante este invierno» frente a una Rusia, cuyo objetivo es «sumirlos en la oscuridad y en el frío», agregó, informó la agencia de noticias AFP.
La reunión, bautizada «Solidarios con el pueblo ucraniano», empezó en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores con la presencia del primer ministro ucraniano, Denys Shmyhal.
Los participantes en la conferencia se concentrarán en cinco sectores fundamentales -energía, agua, alimentación, sanidad y transportes– para permitir a Ucrania conservar sus infraestructuras esenciales.
«El objetivo inmediato (…) es que la red eléctrica ucraniana no se hunda, que no tengamos un apagón de varias semanas, que el agua no se congele en las canalizaciones», explicaron fuentes diplomáticas francesas citadas por AFP.
Este esfuerzo debe conllevar una reparación de las infraestructuras después de cada bombardeo ruso para que la población pueda pasar el invierno y mantener la moral.
En la conferencia participarán «jefes de Estado, jefes de gobierno, ministros» de 47 países, indicó el Elíseo, que debería anunciar la cifra recaudada para la causa.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, tenía previsto intervenir por videoconferencia.
China será la gran ausente de la conferencia, aunque en ella habrá embajadores de los países del Golfo y de India, símbolo de una solidaridad que supera las fronteras europeas y norteamericanas.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) también estarán presentes, aunque no se esperan anuncios nuevos de su parte.
La sesión en el Ministerio de Relaciones Exteriores terminará a principios de la tarde con una rueda de prensa de la jefa de la diplomacia francesa, Catherine Colonna, y el primer ministro ucraniano.
La conferencia continuará en el centro Pierre Mendès-France del Ministerio de Economía y se convertirá en una «bilateral para la resiliencia y la reconstrucción de Ucrania» en la que se intentará movilizar empresas francesas para este esfuerzo.
Medio millar de firmas francesas, desde gigantes bursátiles hasta empresas emergentes del sector digital, fueron invitadas a participar en esta iniciativa a largo plazo.
El coste de la guerra para el país es inmenso.
«Habíamos señalado a principios de septiembre que el coste sería de unos 350.000 millones de dólares, pero esto no cubrirá más que el periodo desde principios de la guerra al 1 de junio», indicó Anna Bjerd, vicepresidenta del BM para Europa y Asia Central.
Una nueva estimación se publicará «a principios de 2023» y será sin ninguna duda más elevada, advirtió.
La economía ucraniana ya se contrajo un 33% por la guerra iniciada por Moscú el 24 de febrero.
«Con los recientes ataques en el país, la contracción será más fuerte, podemos esperar que sea más cercana al 40%», indicó Bjerd.
La institución con sede en Washington no hizo previsiones para el próximo año debido a la «gran incertidumbre» de la coyuntura actual.
Este lunes, los dirigentes del G7 decidieron en una cumbre virtual poner en marcha una «plataforma» para «coordinar la ayuda financiera a Ucrania», anunció el canciller alemán, Olaf Scholz.