Si bien no se informó oficialmente qué causó la fuerte explosión, se investiga si la bolsa tenía un mecanismo en su interior para explotar de forma autónoma o fue detonada con un control remoto. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que se trató de un «atentado vil».

    Al menos seis muertos y 81 heridos, dos de ellos de gravedad, dejó este domingo un ataque explosivo en la avenida peatonal más transitada de Estambul, por el que el gobierno de Turquía responsabilizó a una “mujer”, quien habría detonado una bomba, y prometió que los responsables serán “desenmascarados” y “castigados”.

    El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que se trató de un «atentado vil» cometido con una bomba y que sus autores serán descubiertos y castigados, en declaraciones a la prensa antes de partir a Indonesia para la cumbre del G20.

    Erdogan informó que cuatro personas murieron en el lugar de la explosión y dos más en el hospital.

    Más tarde, el vicepresidente Fuat Oktay elevó el balance de heridos de 53 a 81, dos de ellos de gravedad, calificó el ataque como «atentado terrorista» y responsabilizó por él a una «mujer kamikaze», aunque hasta noche (la tarde en la Argentina) ninguna organización se lo había atribuido.

    «Los autores de este vil atentado serán desenmascarados. Que nuestra población esté segura de que serán castigados», declaró, informó la agencia de noticias AFP.

    Añadió que «un hombre y una mujer estarían implicados» y advirtió que «los intentos de sumir a Turquía y a la nación turca en el terror no van a lograr su objetivo».

    Erdogan no dio más detalles sobre la detonación, que ocurrió a las 16.20 (10.20 hora de Argentina), más que decir que fue un «ataque con bomba», pero medios locales dijeron que podría haber sido un atentado suicida.

    «Los autores de este vil atentado serán desenmascarados. Que nuestra población esté segura de que serán castigados», dijo el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. Foto: AFP.

    Por la noche de este domingo, el ministro de Justicia, Bekir Bozdag, anticipó las líneas de investigación que maneja el Gobierno: «Hay dos posibilidades: o la bolsa tenía un mecanismo en su interior para explotar de forma autónoma o fue detonada con un control remoto; la investigación sigue ambas hipótesis», dijo.

    Bozdag agregó que una «mujer se sentó en un banco durante 40 minutos y luego se levantó: la explosión se produjo uno o dos minutos después», según la agencia ANSA.

    Por su parte, los partidos de la oposición lamentaron el hecho.

    «Deseo la misericordia de Dios para nuestros ciudadanos que perdieron la vida en la explosión en la calle Istiklal, y una pronta recuperación para los heridos», publicó en Twitter el líder del Partido Republicano del Pueblo (CHP), Kemal Kiliçdaroglu.

    También el Partido Democrático de los Pueblos (HDP) expresó su «profundo dolor y pena por la explosión que ha matado a seis de nuestros conciudadanos y heridas a otros 53», recogió la agencia Europa Press.

    «Nuestro pesar y dolor es grande; les deseamos la misericordia de Dios a los ciudadanos que han perdido la vida», añadió.

    Por último, el Partido del Bien (Iyi) repudió el hecho a través de su presidenta, Meral Aksener. «Condeno contundentemente este vil atentado; nos gustaría que los responsables fueran atrapados lo antes posible», apuntó.

    El intendente de Estambul, Ekrem Imamoglu, visitó el lugar. «Fui informado por los equipos de bomberos en Istiklal. Continúan su trabajo en coordinación con la policía», indicó en Twitter, ofreciendo sus condolencias a las víctimas y sus familiares.

    Videos subidos a redes sociales mostraron una gran llamarada y personas tiradas en la calle, en medio de daños materiales.

    En los videos se oye un fuerte estruendo poco antes de verse las llamas.

    Bomberos, policías y equipos médicos se desplegaron en la zona, donde se ubican algunas muchas atracciones turísticas, y que fue acordonada.

    La avenida Istiklal, o la avenida de la Independencia, es una de las calles más transitadas de la ciudad, sobre todo por turistas de todo el mundo, y alberga a numerosos negocios.

    Por ella corre un tranvía que es uno de los íconos de Estambul.

    El Consejo Superior de Radiotelevisión (RTÜK) prohibió rápidamente a los medios difundir imágenes de la escena.

    El objetivo es «evitar sembrar el miedo, el pánico y la agitación en la sociedad y servir los objetivos de organizaciones terroristas», justificó el director de la comunicación presidencial y consejero del presidente Erdogan, Farhettin Altun.

    «Todas las instituciones y organizaciones de nuestro Estado realizan una investigación rápida, meticulosa y eficaz sobre el incidente», prometió en una declaración.

    Entre las reacciones internacionales se destacóa la de Grecia, país con el que Turquía mantiene una disputa por las islas en el mar Egeo y una retórica cruzada con respecto a los contingentes migratorios en la zona.

    «Grecia condena de manera inequívoca el terrorismo, y expresamos nuestras sinceras condolencias al gobierno y al pueblo turco», dijo el Ministerio de Exteriores griego en un comunicado, citado por la agencia Sputnik.

    Además, subrayó que el consulado general de Grecia estaba en contacto permanente con las autoridades locales, y que, según los informes, no había griegos entre las víctimas.

    En tanto, un vocero del consulado argentino en Estambul dijo, consultado por Télam, que hasta esta noche (la tarde en la Argentina) no tenía conocimiento de que hubiera ciudadanos argentinos entre las víctimas.

    Las autoridades de la ciudad «no han informado a las representaciones extranjeras acerca de la nacionalidad de las víctimas», explicó, y agregó que hasta entonces tampoco habían recibido consultar por paradero de argentinos en esa ciudad..

    La avenida Istiklal ya había sido el escenario de ataques en el pasado, especialmente durante los años 2015-2016, cuando Estambul y otras ciudades como Ankara, la capital, sufrieron una serie de atentados.

    Reivindicados por el grupo Estado Islámico, mataron a casi 500 personas e hirieron a más de 2.000.